No es heroicidad, no es arte, no es cultura, no es belleza, no es algo que merezca ser preservado ni mantenido con dinero público por el bién dentodos.
Es un espectáculo de sangre y muerte, que se ensalza la ejecución de un animal que por mucho que digan no está en igualdad de condiciones, si no morirían toreros y toros a partes iguales y al toro que mata al torero se le debería ovacionar y no matar. Es un espectáculo anticuado y caduco, a día de hoy no puede sostenerse por el público cada vez más pequeño que recibe, así que lo pagamos entre todos aunque sea considerado un homicidio. Es un espectáculo en el que menos animal que hay en una plaza de toros es el propio toro.
La historia del primer cuadro es desoladora. Afortunadamente hace unos días vi un seguimiento y el niño, un año después, esta muy bien y bien alimentado por la mujer que lo adoptó (espero que no fuera fake)
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