El mundo feliz para algunos es increpar a un político que no piensa como ellos en mitad de la calle entre un montón de personas como narra la noticia. Eso sí, llega a ser uno de los suyos y encima mujer, y sería acoso, machismo, unga unga, y miles de cosas más.
[*3*] @drizztasd Ahí está la trampa del periodismo. Aparente variedad, aparentes extremos, la solución es fácil: el punto intermedio, ¿de qué? el punto intermedio de entre lo que me dicen.
Mientras tanto, las noticias verdaderamente importantes tienen un foco muy pequeño o directamente son ignoradas. Y a veces, cuando la realidad obliga a los medios a mostrarla, resulta que todos tienen una idéntica posición, y se tratara de lo imparcial y de lo objetivo.
[*4*] @alcanza2 Por eso yo intento informarme en dos tipos de medios: de un lado ideológico y del otro, pero dentro del "mainstream". Y luego aparte, de un lado ideológico y del otro, pero fuera del "mainstream". Por ejemplo, simplemente siguiendo a Willy Toledo te enteras de un montón de noticias que los medios de masas no suelen cubrir en absoluto, y aunque hay mucha mierda tipo teoría de la conspiración, que si Francia orquestó los atentados de Bataclán y eso, al menos tengo la oportunidad de enterarme de estas cosas, y juzgarlas por mí misma.
No queda otra, creo. Un hombre con un reloj sabe la hora que es. Uno con dos relojes ya no está tan seguro. En esta sociedad de la desinformación lo más cuerdo es tener un montón de relojes, incluso los que evidentemente van a deshora.
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