El flamenco: el arte del cante, el baile y la guitarra española

El flamenco está considerado como una de las manifestaciones culturales más emblemáticas de nuestro país . España es reconocida a menudo a nivel internacional gracias a estos sonidos, trajes y movimientos tan característicos de nuestra tierra.

A lo largo de nuestra historia, el flamenco ha influido en todo tipo de aspectos culturales: desde la literatura al cine, pasando por la pintura y las artes visuales.

El flamenco ha ido ganando importancia y reconocimiento con el paso del tiempo. Hubo un momento en la historia de nuestro país que dicha danza dejó de ser marginal para convertirse en una parte fundamental de nuestra identidad nacional .

Aquí os dejamos algunas curiosidades sobre el arte que enamora a autóctonos y extranjeros:

El género musical del flamenco nació en el seno de Andalucía, más concretamente, en la zona de Cádiz, sus alrededores y sus puertos (San Fernando, Jerez de la Frontera), Sevilla y diferentes municipios de su provincia, Huelva, Córdoba y Granada.

Para sorpresa de muchos, el flamenco también cogió fuerza y ​​​​se empezó a desarrollar muy pronto en la región de Murcia, el sur de Castilla-La Mancha y Extremadura, por lo que los orígenes son un poco difusos.

Cuando hablamos de flamenco, hablamos entre otras cosas del cante, del toque y del baile, así como de los vestidos, trajes y sonidos.

Si queremos saber la fecha en la que surgió el flamenco que conocemos hoy en día (aunque está evolucionado todo el tiempo) tenemos que remontarnos al siglo XVIII, aunque ya existían variaciones alrededor del siglo XVI y XVII, momento histórico en el que el pueblo gitano se asentó en el territorio e impulsó este género.

El baile flamenco necesita de una gran capacidad de aguante físico, puesto que implica un gran movimiento corporal. Este arte se caracteriza por la entrega de los bailarines, los giros y las palmas, así como por el zapateado y taconeo al ritmo de la percusión. La guitarra española, las castañuelas y el cajón flamenco tienen un peso increíble, puesto que en este tipo de danza, el ritmo lo es todo. Además, en muchas ocasiones los bailarines se apoyan accesorios para dar mayor fluidez y adorno a la danza: mantoncillos, peinetas, flores, vestidos de volantes, gorros de cordobés, abanicos, etc.

A lo largo de la historia, el sonido del flamenco ha tenido un sinfín de variaciones, interpretaciones y diferenciaciones. Voces rasgadas que apelan directamente a los sentimientos, quejíos y florituras hacen que los cantaores sean considerados como algunos de los artistas que mejor transmiten las emociones a la audiencia.

Como ya hemos explicado con anterioridad, el flamenco no se entiende sin un buen uso de la guitarra española, instrumento que pone en pie las canciones y que crea todo tipo de melodías para acompañar las voces y los bailes. También es indispensable el uso de la percusión, ya sea con castañuelas o cajón, puesto que al bailar dicho género musical es muy importante llevar los tiempos bien marcados.

Cabe destacar que si bien existe una corriente que cree que el flamenco solamente es Camarón de la Isla o Enrique Morente, existen nuevas figuras en el panorama musical español como Rosalía o India Martínez que fusionan este género con muchos otros.